Producer/Host: Kathleen March
Transcript:
This is Kathleen March. Welcome to WERU’s US-EL Salvador Report. This week’s topic is the sentencing of the assassins of Franco-Spanish film director Christian Poveda, who filmed a documentary on the gangs. The report has been prepared by the University of Maine in collaboration with Radio Sumpul in El Salvador and US-El Salvador Sister Cities.
Hace unos días empezó la etapa final de un proceso contra más de 30 miembros de la “Pandilla 18”, acusados de haber conspirado para asesinar al cineasta y periodista franco-español Christian Poveda, en septiembre de 2009, en Tonacatepeque. El Tribunal de Sentencia Antimafias de San Salvador concluyó sus deliberaciones después de recibir pruebas y argumentos por parte de fiscales y abogados defensores.
La Fiscalía General de la República salvadoreña había pedido 50 años de cárcel para los acusados, dos de los cuales son mujeres, por conspiración para cometer el homicidio de Christian Poveda. El juez condenó a tres pandilleros por ser los autores intelectuales y materiales del asesinato.
Luis Roberto Vásquez (alias Tiger), fue condenado a 30 años, y fue el que disparó al periodista cuatro veces. José Alejandro Melara (alias Puma), recibió 30 años por ser el autor intelectual del asesinato. Keyri Mayorga Alvárez, la única mujer sentenciada, fue condenada a 20 años, por cómplice.
Otros ocho pandilleros recibieron penas menores, de cuatro años de cárcel, por pertenecer a agrupaciones ilícitas. Entre ellos está Napoleón Espinoza, un ex agente de la policía, quien según algunos identificó a Poveda como “informante de la policía”. Otros 20 pandilleros de la Mara 18 fueron absueltos, pero 17 siguen encarcelados porque han cometido otros delitos.
La vida loca
Christian Poveda era argelino, nacido en 1955. Era hijo de republicanos españoles exiliados. En el momento de su muerte, vivía en El Salvador, donde había trabajado como fotoperiodista durante la guerra civil. En su trabajo de fotógrafo había hecho informes de las guerras del Sáhara entre otros conflictos africanos; en Latinoamérica había trabajado en Chile, Argentina, Guatemala y El Salvador.
En una entrevista con ContraPunto, comentó Poveda que: “Durante la guerra salvadoreña, uno encontraba en cualquier lado los cadáveres de los asesinados. Regreso varios años después, en 2007, y sigue el reguero de cadáveres, esta vez a causa de la violencia de las pandillas. Eso me intrigó y por eso vine para investigar y hacer un trabajo que explicara eso desde su propio seno”. Hasta su muerte en 2009, Poveda investigó durante dos años, en barrios de San Salvador y en las cárceles, la vida de las pandillas, especialmente de la Mara 18, surgida en Los Ángeles, California con el nombre de la Mara Salvatrucha.
“La vida loca”, título del documental de Poveda, es frase de los pandilleros a los que entrevistó. Según fuentes del Buró Federal de Investigaciones de EE UU (FBI, por sus siglas en inglés), 30.000 jóvenes pertenecen a las maras 18 y de la Salvatrucha, que son rivales a muerte por el dominio de territorios de venta de drogas, tráfico de armas, extorsiones y asesinatos por encargo. El pandillerismo hace que El Salvador sea uno de los países más peligrosos del mundo: tiene una tasa de homicidios de 70 por cada 100 mil habitantes. La Organización Mundial de la Salud considera epidemia una tasa 10 veces menor. El documental de Poveda fue presentado en el Festival de Cine de San Sebastián en septiembre de 2008, y en otros festivales de México, Cuba y Europa.
Se declaró que Poveda no cumplió su promesa de ayudar económicamente a los protagonistas de La Vida Loca –para el que pasó 16 meses de rodaje. Los miembros de la Mara 18 parecen haberse sentido traicionados cuando comenzó a circular un DVD pirata de La Vida Loca, cuando el director se había comprometido a no difundir su obra en El Salvador. También es posible que no se eliminaran varias escenas que podrían poner en riesgo a algunos mareros.
This was Kathleen March with WERU’s US-EL Salvador Report. This week we discussed the sentencing of the assassins of Franco-Spanish film director Christian Poveda, who filmed a documentary on the gangs. The report was prepared by the University of Maine in collaboration with Radio Sumpul in El Salvador and US-El Salvador Sister Cities.