Producer/Host: Kathleen March
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This is Kathleen March with WERU’s US-El Salvador Report. This week’s topic is the halt to forced recruiting declared by gangs in El Salvador. The report has been prepared by the University of Maine in collaboration with Radio Sumpul and US-El Salvador Sister Cities.
? Las pandillas de El Salvador han prometido el cese del reclutamiento forzoso de jóvenes y declarado que las escuelas serán “zonas de paz”, según un portavoz de la Mara-18 en el centro penal de Quezaltepeque, al norte de San Salvador.??”… en adelante quedan abolidas todas las formas de reclutamiento involuntario de personas menores y mayores de edad a nuestras filas”, declaró Víctor Antonio García, líder de la Mara-18, una de las dos principales pandillas en el país, (la otra es la Mara Salvatrucha, MS-13).?? También se ha declarado que todos los centros escolares del país, públicos y privados serán zonas de paz. Las maras constantemente reclutaban a estudiantes desde los 12 años en las escuelas. Así se afirma que las escuelas “ya no serán consideradas como zonas en disputa territorial, lo cual permitirá que alumnos y maestros puedan desempeñar sus actividades educativas con toda normalidad y los padres de familia se liberen de toda preocupación”.
Después de la tregua entre las maras, guiada por el vicario castrense Fabio Colindres y el excomandante guerrillero y diputado Raúl Mijango, el promedio de homicidios diarios en El Salvador se redujo de 14 a 5, según algunas fuentes.
Los pandilleros dicen que ellos pueden ser parte de “la solución al más grave problema que agobia a la sociedad salvadoreña”.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, visitará El Salvador en junio para conocer la tregua pactada entre las principales pandillas con la mediación de la Iglesia católica. Insulza aceptó la invitación del presidente Mauricio Funes, informó la Organización de Estados Americanos.
Colindres, “por encargo del Gobierno salvadoreño, ha conducido un inédito proceso de tregua entre miembros de pandillas” en El Salvador, observó la OEA. Como resultado ha habido “una disminución de alrededor del 63 por ciento en los homicidios cometidos en todo el país”. La OEA subraya que el 14 de abril fue el primer día, desde que existen registros estadísticos, sin homicidios en El Salvador.
El 20 de marzo Colindres anunció la tregua entre las dos principales pandillas del país, la Mara Salvatrucha y la Pandilla 18. Poco después el presidente Funes afirmó que mantendrá el combate a las pandillas a pesar de la tregua, que ha visto la reducción de los asesinatos en el país, según el Gobierno. El verano pasado, Funes había anunciado que crearía un servicio militar “sin armas”, un esfuerzo por alejar a los jóvenes de las maras. El proyecto del Servicio Militar Obligatorio de Protección Civil busca “integrar” a las filas castrenses “para su protección a 5,000 jóvenes en riesgo de ingresar a las pandillas”. Los jóvenes recibirán “seis meses de orientación para su rehabilitación por medio de adiestramiento militar sin armas”, dijo Funes ante el Congreso.
Los participantes en este programa de “protección civil” recibirán una formación vocacional para lograr un cambio en su conducta y su inserción en la vida productiva del país. “Está previsto que estos jóvenes aprendan tareas de protección civil, de manera que sirvan de apoyo al país en labores de prevención y mitigación de riesgos”, dijo Funes. El presidente añadió que, mientras cumplan el servicio militar obligatorio en este programa, los jóvenes permanecerán en “centros de formación ciudadana” y recibirán un salario.
La violencia, principal queja de los salvadoreños, es causada principalmente por unos 18,000 miembros de maras o pandillas, que extorsionan a comerciantes y transportistas, y por bandas del crimen organizado, que trafican drogas, armas y personas.
El presidente del Congreso, Sigfrido Reyes, elogió la iniciativa destinada a alejar a los jóvenes de las pandillas. Aunque según la Constitución el servicio militar es obligatorio para todos los salvadoreños de entre 18 y 30 años, una fuente castrense dijo que actualmente el servicio militar es voluntario.
El ministro de Justicia y Seguridad, Manuel Melgar, explicó que este servicio militar de protección civil será obligatorio para jóvenes en riesgo de convertirse en pandilleros o ser asesinados por esos grupos; busca ofrecer una “capacitación sobre la base de una disciplina militar” para convertirlos en personas “productivas”.
Funes señaló como uno de los “problemas centrales” del país la delincuencia, el crimen organizado y el narcotráfico, aunque destacó que “El Salvador ha logrado detener la tendencia al alza delictiva”. Su Gobierno, apoyado por Estados Unidos, “ha asumido el liderazgo regional en materia de seguridad y está decidido a impulsar acciones y políticas conjuntas para combatir esta lacra que atraviesa el continente, desde Colombia hasta EU”. Para luchar contra la delincuencia, el presidente Funes informó que destinará otros 1,000 policías para ampliar la presencia territorial de las fuerzas de esa institución y del Ejército. El Gabinete de Seguridad propuso crear una comisión encargada de darle seguimiento a los casos que lleve la Fiscalía. Funes recibió muchas críticas por la incapacidad de acabar con la violencia, aunque su nivel de aprobación es de 57% a 67%.
This has been Kathleen March with WERU’s US-El Salvador Report. This week we discussed the halt to forced recruiting declared by gangs in El Salvador. The report was prepared by the University of Maine in collaboration with Radio Sumpul and US-El Salvador Sister Cities.